El pasado 24 de marzo pusimos “toda la carne en el asador”. Después de más de un año ensayando, compás a compás cada una de las piezas del concurso, de desafiar al frío cantando con mascarilla y aulas bien fresquitas y ventiladas, de grabar audios para un mejor seguimiento de los avances,… los alumnos de ESO-BACH van a cantar en el XVII Certamen de Coros Escolares de la CAM.
No sabemos qué pasará, si llegaremos a la final o no. Pero estamos convencidos de que vamos a disfrutar con esa grabación en la iglesia de Santa María, que tan generosamente nos cedió su párroco D. Juan Miguel Prim.
Y es que cuando uno se pone a pensar en las bondades de esta actividad, la mente se acelera y como si de un soliloquio teatral se tratase, los pensamientos fluyen de esta manera…
“Controlar la respiración. La pronunciación de las palabras. Musicalidad interior y exterior. Silencio que nos prepara para la música. Trabajo en equipo. Escucho a los demás. No soy nada sin el otro. Esfuerzo diario y continuo para lograr que esa melodía, endiablada llena de sostenidos se meta en mi cabeza y genere una armonía con las otras voces. Control de los nervios. Postura correcta. Emisión y dosificación del aire. Bilingüismo o más bien “poliglotismo”, porque las piezas que interpretamos están en tantísimos idiomas: inglés, alemán, latín, swahili, italiano, …
¡¡Mamá, papá, gracias por dejarme cantar en un coro!! Gracias por traerme sábados, domingos, mañanas, tardes e incluso noches. Gracias por “aguantar” esos primeros compases desafinados que salen de mis labios, esas melodías por voces separadas que requieren de una gran fe el pensar que, de ahí, de eso, puede algún día sonar algo coherente. Gracias por no asustaros cuando me veis aguantando la respiración al ritmo de un metrónomo o con un vaso lleno de agua y una pajita haciendo unos ejercicios incomprensibles.
Alborada, gracias por fomentar el amor a la música coral”
Les deseamos lo mejor a estos chicos que tantos años llevan enriqueciendo las celebraciones del colegio con sus voces. Julieta Romeo