Solicita información

La grandeza de José

EDUCACIÓN

La grandeza de José

Los cristianos hemos tardado en darnos cuenta de la grandeza de San José. Ciertamente, los Evangelios dicen muy poco sobre él.

Autoría: D. Julio de la Vega

19 de marzo del 2024

3 min de lectura

Desde muy pronto, se ha intentado cubrir esa falta de conocimiento, pero con poca fortuna. Un ejemplo típico es el texto que se expone a continuación, escrito seguramente en la primera mitad del siglo II, y atribuido al apóstol Santo Tomás:

            Y su padre (de Jesús) era carpintero, y hacía en aquel tiempo carretas y yugos. Y un hombre rico le encargó que le hiciese una cama. Mas, habiendo cortado una de la patas más pequeña que la otra, no sabía qué partido tomar. Entonces el niño Jesús dijo a su padre José: pon las dos piezas en el suelo, e iguálalas por tu lado. Y José hizo lo que el niño le había indicado. Y Jesús se puso al otro lado, tiró de la pieza más corta, y la igualó con la otra. Y su padre José, viéndolo, se quedó admirado, y abrazó a Jesús, diciendo: ya puedo felicitarme de que Dios me haya dado este niño.

El evangelio en cuestión es falso, y no lo escribió el apóstol Tomás. Seguramente se escribió con la mejor de las intenciones, pero eso no impide que su contenido sea desafortunado. San José era, efectivamente, artesano, y con toda seguridad haría objetos de madera. Lo que no hacía eran chapuzas. Trabajaba muy bien, no le salía una pata más corta que las demás.

Bueno, pero se puede objetar que hasta el mejor profesional puede tener un fallo. Ciertamente, pero, si ocurriera, sabría perfectamente cómo reaccionar, seguramente echando mano de otra pieza para cortarla como era debido. Desde luego, sería absurdo que un buen profesional no supiera qué partido tomar.

Y, para completar el desatino, aquí nos presentan un niño Jesús haciendo milagritos para subsanar la incompetencia, o la indecisión, o la chapuza de José.

La verdad, no hace falta un estudio histórico para darse cuenta de la falsedad de ese pretendido evangelio. Pero escritos como ese han contribuido a desfigurar la realidad y el verdadero mérito de San José. Buscando milagros por cada esquina, se ha perdido de vista que la verdadera santidad está en la virtud heroica, esa que se manifiesta cada día, esa que caracterizó a San José, sin ninguna necesidad de que fuera acompañada de toda clase de milagros.

La grandeza de San José hay que encontrarla en ver a un hombre que vivía de cara a Dios y, por ello, convertía toda su vida en un servicio a los demás, y un servicio, por así decirlo, de calidad. Eso significa un trabajo bien hecho, una entrega constante y afable en la  vida familiar y en la vida social, una integridad moral que rechaza cualquier fraude o engaño o los cotilleos propios de un lugar pequeño como Nazaret, y una vida de oración auténtica.

Dios no eligió, para hacer de padre de su Hijo, a cualquiera. Eligió al mejor. A un hombre santo. Santo en una vida que no era particularmente llamativa, santo en la vida cotidiana. La que hacía falta para que Jesús creciera antes de que llegara la hora de mostrarse como lo que era: el Mesías, el Redentor, el Hijo de Dios.

ETIQUETAS

Últimas noticias

Suscríbete a la newsletter


Sin duda, San José lo tenía más difícil

EDUCACIÓN

Sin duda, San José lo tenía más difícil

Hay una película protagonizada por Morgan Freeman y Jack Nicholson, titulada «Ahora o nunca», que trata sobre dos amigos enfermos terminales de cáncer y su actitud ante la vida.

Autoría: D. Arturo Garralón Blas

15 de marzo del 2023

3 min de lectura

Recuerdo una secuencia en que Morgan Freeman está con otra persona en un bar y manifiesta de forma clara su fidelidad a su esposa. La otra persona le dice que su mujer tiene una gran suerte de tener alguien así, a lo que Freeman contesta: «No, realmente soy yo el que tengo mucha suerte por tener una mujer así».

Si pudo haber alguien orgulloso en el mundo por la mujer que tenía, ese fue San José

Así se recoge en unas palabras del propio San José, imaginadas por Diego Zalbidea:

«a mí Dios me pidió estar en el mejor sitio del mundo, junto a su Hijo queridísimo y junto a la mejor criatura que ha habido nunca…

Tuve que acostumbrarme a meter la pata sin sufrir porque vivía con dos personas absolutamente perfectas y que nunca se equivocaban, ni se enfadaban, ni se quejaban, ni eran egoístas.

Comprenderéis que era patente mi ineptitud. Muchas veces me decía a mí mismo: «José, eres tonto, y además eres un soberbio porque has pensado que podrías estar a la altura»».

Sin duda, San José lo tenía más difícil. Si había algún problema en la marcha de su casa, ¿de quién podía ser la culpa? ¿De Jesús, el Hijo de Dios? ¿De María, la criatura más perfecta? ¡Vaya papelón! Pero fue él precisamente el elegido por Dios para proteger, alimentar y mimar las dos joyas más valiosas del mundo. San José no se amilanó, supo bordar su papel, ejerció a la perfección la función de cabeza de una familia judía, y enseñó a rezar a Jesús, a bendecir la mesa, le llevó al templo, etc., ¡al mismo Dios hecho hombre!

En cierta manera, ningún padre de familia está a la altura de su misión, si de verdad valora el matrimonio y valora a su familia. Aprendamos de San José, especialmente los padres, a descubrir el tesoro que es la familia y, como consecuencia, a ejercer ese liderazgo, también en lo espiritual, aunque uno no se sienta a la altura, que Dios encomienda a cada padre de familia.

ETIQUETAS

Últimas noticias

Suscríbete a la newsletter


Preguntas frecuentes

¿Qué nos identifica en el Colegio Alborada?

Somos un colegio que pertenece a la Red Educativa Arenales. Aquí buscamos la excelencia académica, pero también la humana, porque una buena persona suele ser un buen profesional. Por eso el respeto a los demás, a uno mismo, el trabajo bien hecho, son valores humanos y cristianos que inculcamos en nuestros alumnos de la mano de sus padres. Tenemos el ambicioso objetivo de servir a la sociedad, a las familias y a los alumnos.

¿Qué aporta que el colegio Alborada pertenezca a Arenales Red Educativa?

Alborada es el primer colegio de la Red Educativa Arenales. En estos momentos la red la componen más de 28 centros educativos distribuidos por todo el mundo. Todos ellos asumen un modelo de competencias y valores llamado IAM (Innovación, Autonomía, Mentoring). Así como incorpora el código de buenas prácticas, el reglamento de régimen interno y el plan de igualdad. Todos ellos documentos que tienen su origen en años de experiencia y buscan garantizar la equidad, la inclusión y la igualdad.

¿Qué es el modelo IAM?

IAM es un programa de transformación con el que buscamos ser centros educativos de vanguardia en el siglo XXI. Este programa se divide en tres grandes ejes: Innovación: buscamos ser una organización abierta y en permanente comunicación con el mundo en el que vivimos. Autonomía: ayudamos a cada uno de nuestros alumnos a tomar las riendas de su vida, a ser personas autónomas. Mentoring: cada uno es protagonista de su propia educación y, a la vez, colabora de las de los demás.

¿Cómo se aplica el programa IAM en el colegio Alborada?

Innovación: A través de la iniciativa iPad se consigue la integración de la tecnología en la educación. Así como plan de desarrollo de currículo digital ”Mobile Learning” a lo largo de todas las etapas. Autonomía: Fomentamos la educación en soft skills: el desarrollo de la oratoria, capacidad de liderazgo, desarrollo del pensamiento emocional, pensamiento creativo y primeros auxilios etc. Mentoring: A través de las tutorías personales entre el profesor y el alumno, para ayudarle a que se conozca mejor, para desarrollar las habilidades sociales, para sacar partido a sus talentos, para que forje su autoestima, y que autónomamente sea feliz.

Solicita información

Tenemos las puertas abiertas para ti: queremos conocerte, enseñarte las instalaciones y mostrarte el proyecto educativo, para ello rellena el formulario y programa una visita o pregúntanos lo que quieras.